Cómo funcionan las gafas de luz azul - NIUS

2022-10-12 17:54:24 By : Ms. Vangood ZS

Fatiga visual, sequedad ocular y dolores de cabeza. Son síntomas propios del teletrabajo y del telestudio, dos hábitos que han cobrado fuerza desde la irrupción de la pandemia. "Tras ocho horas delante de una pantalla, me acababan picando los ojos, era horrible, explica Sergio, a quien la covid-19 le ha hecho descubrir el remedio, las gafas de luz azul, aunque los expertos inciden en que "no son para todo el mundo".

Este joven de 23 años ha trasladado su jornada laboral a casa y, como no necesita gafas, se las han hecho sin graduar: "Desde entonces, las molestias han desaparecido" celebra. Un alivio que comparte con Irene, una estudiante en la Universidad de Granada que acusaba la época de exámenes: "Me despertaba con molestias en los ojos". Ella se informó y se compró unas por Navidad, y lo agradece: "Ahora me las pongo siempre que estoy delante del ordenador y he notado bastante el cambio a mejor".

Pasar tantas horas en casa expuestos durante largos periodos a la luz que emana de las pantallas de ordenadores y móviles, cada vez más trabajadores y estudiantes deciden incorporar un filtro de luz azul en sus gafas o adquirir unas sin graduación expresamente con estos cristales. Este tipo de lentes protege los ojos repeliendo parte de esta luz, típica de los aparatos electrónicos, según describen los expertos.

No obstante, el uso de cristales con filtro de luz azul "no es una recomendación universal". De hecho, Delgado insiste en la necesidad de consultar a un oftalmólogo: "Si una persona está interesada en incorporar un filtro de luz azul, lo más importante es acudir a un profesional, este lo examinará y determinará la necesidad del filtro", y recuerda: "Su uso dependerá de las necesidades de cada paciente".

La luz azul es una parte de la luz visible y forma parte de la blanca que proviene del sol. La exposición natural a la luz azul es beneficiosa para el cuerpo humano, ya que controla el ritmo cardíaco, el estado de vigilia y del sueño, y favorece la agudeza mental. Según Óptica Universitaria, el problema llega cuando la retina sufre una sobreexposición de luz azul de manera artificial y se pone en riesgo la salud visual.

La exposición prolongada a pantallas y fuentes de luz LED puede desarrollar fatiga visual y sequedad ocular acompañada de dolores de cabeza. Esto se debe al gran esfuerzo que llevan a cabo los ojos para enfocar pequeños puntos en una pantalla cercana. Por ello, Óptica Universitaria recomienda usar protección ante este tipo de luz; de lo contrario, tal y como destaca la Investigación de Química Óptica de la Universidad de Toledo (2018), la sobreexposición de luz azul podría desencadenar una degeneración muscular.

Asimismo, como la luz azul altera el estado de vigilia, es recomendable regular nuestra exposición al acabar el día. "Si justo cuando llega la noche, que es cuando se va a dormir, se empieza a utilizar un dispositivo que emite luz azul en grandes dosis y a corta distancia, está diciendo a su cerebro que no es hora de ir a dormir", en palabras de Fabio Delgado, especialista en contactología y director técnico de Ópticas Cottet.

Mientras han aumentado las molestias y los problemas oculares como consecuencia a la exposición a pantallas, también lo han hecho los casos de miopía. El doctor Fabio Delgado afirma tener la certeza de un incremento de los mismos los últimos años; de hecho, la OMS la considera una pandemia. "Aun así, no podemos decir que las pantallas provocan esta degradación de la visión", reconoce Delgado, que agrega: "Existen estudios que demuestran los niveles de toxicidad de la sobreexposición a la luz azul, pero no a largo plazo".

Las causas asociadas al incremento de casos de miopía son, principalmente, las altas exposiciones a luz seminatural, la falta de tiempo en espacios al aire libre y, sobre todo, mirar de cerca aparatos como el móvil o el ordenador , un hábito en auge en pandemia. "Es lo que más daña la visión, todo esto va a tener efectos a largo plazo y va a provocar un incremento de miopes en la población", augura el experto.

Hay otras formas de protegerse la vista cuando más le exigimos. El Dr. Ahmad Zaben, miembro de la Asociación Española de Optometristas, cree necesario "reducir las horas que pasamos frente a una pantalla y tener descansos programados cada 20 minutos para que los ojos parpadeen y prevenir la sequedad". También es importante reducir el brillo de la pantalla o utilizar el filtro de luz nocturna si el dispositivo lo tiene instalado, incide.